Tiroides, yodo y enfermedad de Lyme crónica.

Siempre me he preguntado por qué un gran número de enfermos de Lyme crónico desarrollan hipotiroidismo u otros problemas con la glándula tiroides.

El Dr. Kenneth Sandström, médico especialista en la enfermedad de Lyme crónica, miembro del ILADS y colaborador en Nutrilyme, responde:

Qué fue primero, el huevo o la gallina 🤔

¿Desarrollamos los enfermos de Lyme crónico hipotiroidismo, o las personas con prevalencia a tener hipotiroidismo son más propensas a desarrollar síntomas del Lyme?

El Dr. Kenneth comenta que efectivamente hay una relación entre las enfermedades tiroideas y la enfermedad de Lyme crónica. «Las Borrelias u otras infecciones como la Bartonella pueden dañar directamente a la glándula tiroides afectando a su correcta función, pero el problema también puede encontrarse en el hipotálamo o en la hipófisis».


Cuenta el caso de una paciente a la cual le hacía los análisis clínicos pertinentes para ver su tiroides periódicamente y, después de 2 años al cuarto análisis de sangre, arrojó resultados positivos de hipotiroidismo.
Esta paciente le recalcó al doctor que lo que tenía era hipotiroidismo, y que no tenía la enfermedad de Lyme crónico. Pero el Dr. Kenneth lo vio claramente, al contrario ⬇

«Esta paciente desarrolló un hipotiroidismo producido por una infección por la enfermedad de Lyme crónica».


¿Hay que dar hormonas tiroideas a personas enfermas de Lyme además de los protocolos antibióticos/ antimicrobianos correspondientes? ¿O es posible que, recibiendo el tratamiento antibiótico adecuado, se pueda curar los problemas en la glándula tiroides, sin tener que usar dichos medicamentos hormonales?


Si tenemos análisis que apoyan el diagnóstico y nos dice que el paciente tiene hipotiroidismo, debe recibir un tratamiento hormonal. Sin embargo, he visto a pacientes que han podido terminar con las hormonas tiroideas después de un tiempo en tratamiento, pero se debe hacer una observación de cerca y diferentes análisis médicos para controlar que los parámetros estén dentro de la normalidad».


¿Hay diferencias entre sexos en el padecimiento de hipotiroidismo en la enfermedad de Lyme crónica?


«Sí, realmente no tengo datos que lo corroboren, pero pienso que suelen ser más mujeres que hombres que padecen esta patología«.


Posteriormente el Dr. Kenneth hace referencia de un libro «Evidence based Approach to Restoring Thyroid Health» escrito por Dr. Denis Wilson.
Este médico es conocido porque utilizaba unas tablas para apuntar 4 veces al día a diferentes horas, durante meses, la temperatura corporal del paciente para controlar el estado de la tiroides. También le da más importancia al valor de la T3 (hormona activa) como referencia a la hora de establecer un diagnóstico sin tener en cuenta la T4. Y nos habla mucho de la T3 reversa (hormona que frena la actividad de la T3). Y nos dice que el 80 % de sus pacientes son del sexo femenino.


¿Es un buen método Dr. Kenneth, el medir la temperatura corporal en el día durante un tiempo determinado, para saber si el funcionamiento de la glándula tiroides es normal?


«La medición de la temperatura corporal es un valor sobre la regulación de la temperatura en el organismo. Naturalmente hay muchas variables que influyen en esta regulación corporal y no sólo la glándula tiroides. El llevar un control de tu temperatura, pueden servir como una guía, pero no son datos determinantes».

Por último, comenta el Dr. Kenneth lo delicado que es establecer un diagnóstico cuando el paciente tiene sintomatología de hipotiroidismo, pero sus analíticas no apoyan el diagnóstico.

«Me gustaría saber más sobre cuanta T3 reversa se forma en una infección crónica. Eso podría aclarar la irracional relación entre los valores de laboratorio y los síntomas. Pero desgraciadamente, hay pocos laboratorios que realizan estas pruebas.»



La importancia del yodo



El 70% del yodo total del organismo, se concentra en la glándula tiroides, 10% en la piel y el 7% en el esqueleto. De ahí la importancia de este mineral para que la glándula tiroides funcione correctamente.


Cuando consumimos yodo, es de fácil absorción (cerca del 100%), éste va directamente a suplir las necesidades de la glándula tiroides, y posteriormente a otras partes del organismo que lo necesiten. El yodo sobrante, se expulsaría primeramente a través de los riñones por la orina, o secundariamente por la expiración y/ o el sudor.


Además:

Todas las células de nuestro cuerpo necesitan yodo para que puedan funcionar adecuadamente.

Se necesita yodo para tener un correcto metabolismo.

Para regular la temperatura corporal.

Para el correcto crecimiento celular.

Para la producción de energía y suministro de oxígeno.

Además de ésto, posee efectos antibacterianos clínicamente demostrados.

La regulación de las funciones de la glándula tiroides es un proceso complejo en el que el cerebro (hipotálamo) y la hipófisis entran en juego. De ahí a que el Dr. Kenneth menciona que el problema también podría localizarse en estas dos glándulas y no directamente en la tiroides.

La organización mundial de la salud (OMS) dice que el 30 % de la población mundial tiene carencia de yodo en su dieta.

12 indicadores generales causados por falta de yodo en el organismo:

  1. Hipo e hipertiroidismo.
  2. Bocio.
  3. Pies y manos fríos.
  4. Fría temperatura corporal en la mañana.
  5. Garganta inflamada.
  6. Párpados inflamados.
  7. Aumento o disminución de peso.
  8. Caída del cabello.
  9. Cansancio, fatiga o/ y debilidad muscular.
  10. Sensibilidad al ácido láctico.
  11. Estreñimiento.
  12. Depresión.

Causas que pueden producir la falta de yodo:

  • Falta de yodo en la dieta de alimentos como el pescado, mariscos, algas, sal yodada…
  • Algunos vegetales que contienen una sustancia llamada goitrógenos, si los consumimos en grandes cantidades pueden afectar a la absorción de yodo o a la producción de hormonas tiroideas. Como, por ejemplo: la col, brócoli, coliflor y coles de Bruselas. Otras isoflavonas, genisteína y daidzeína, la cuales se encuentran en la soja, también reducen la síntesis de la hormona tiroidea.
  • Falta de hierro, vitamina B3 y el aminoácido tirosina, que son también fundamentales además de yodo claro está, para que la glándula tiroides funcione correctamente.
  • Las mujeres embarazadas y lactantes aumentan su necesidad de yodo.
  • El mercurio bloquea la capacidad de la tiroides de absorber el yodo.
  • Mala absorción y enfermedades inflamatorias intestinales.
  • Edad mayor de 50 años.

Pruebas para saber si podemos tener hipotiroidismo además de los síntomas que comenté anteriormente:


Análisis de sangre. En los cuales se medirán que la TSH, T4 y T3 se encuentren en valores normales. Es un parámetro para diagnosticar la patología, pero no es definitivo ya que como comentaba el Dr. Kenneth puede haber sintomatología, pero las pruebas médicas no lo respaldan con lo que se podría padecer un hipotiroidismo subclínico. Él destaca y le da más importancia a los valores de la T3 activa y T3 reversa (si encuentras un laboratorio donde puedas hacerte los análisis) que a los otros parámetros.

Toma de temperatura corporal durante 4 días por las mañanas. La temperatura normal suele estar entre 36’5 a 37’0. Si está la temperatura por debajo puede indicar baja función de la glándula tiroides y si está por encima, hipertiroidismo.


Prueba de yodo. Para saber si podríamos tener déficit de yodo en nuestro organismo, se puede realizar esta prueba:

Nos ponemos una gota de yodo Lugol del tamaño de una moneda de 10 céntimos en la parte superior del antebrazo, masajeando un poco la zona. Este yodo tiene un color marrón que se te quedará en la piel. Ya que el yodo se absorbe bien por vía cutánea, si este círculo o marca marrón desaparece antes de 12 horas, indicará que tenemos falta de yodo ya que el cuerpo lo absorberá. Mientras más rápido desaparezca, más falta podríamos tener.

Este test casero no dice mucho del funcionamiento de la glándula tiroides, pero si nos podría indicar un déficit de yodo. Habría que saber si la glándula tiroides está funcionando bien y no tiene bloqueada la absorción de yodo.

Dosis de yodo de referencia diaria en la alimentación: 150 mcg.
-Dosis de yodo óptimas en forma de suplementos recomendada: 150- 300 mcg.
-Dosis terapéutica a través de suplementos para tratar un determinado problema: 300- 100.000 mcg.
-❌Dosis tóxica por encima de 100.000 mcg a través de suplementación.


*Personas con enfermedad tiroidea autoinmune y niños con fibrosis quística, pueden ser más sensibles a los efectos negativos de la sobredosificación de yodo.


Interacciones con medicamentos:


Amiodarona. Medicamento utilizado para enfermedades del corazón contiene grandes cantidades de yodo y puede influir en la función de la tiroides. No se debe combinar con dosis terapéuticas de yodo.
Medicamento anticoagulante (Warfarina). Dosis farmacológicas de yoduro potásico puede disminuir la acción anticoagulante de la medicina.
Levotiroxina. El yodo puede potenciar los efectos de este fármaco.

Ya sabes, antes de realizar cualquier tipo de cambio en tu dieta, suplementación o medicación consulta con tu médico y/o terapeuta 👨‍⚕️👩‍⚕️

Nutrilyme no te da consejos médicos, te da las herramientas e información necesaria, para reflexionar, entenderte, y poder mejorar tu calidad de vida a largo plazo.

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